El hotel en sí era bastante caro, aunque contaba con un personal excepcional. Habitaciones tranquilas, el diseño es acogedor. Entre las comodidades tenía una caja fuerte privada, una mesa de trabajo y una llave electrónica. Una ubicación estupenda para pasear cerca del Ladin Museum.

El personal era poco amigable.

El personal era súper amigable y la habitación tenía una excelente vista. Además, el hecho de contar con un bidé, un gorro de ducha y toallas en el baño fue todo un lujo. La ubicación del hotel era ideal, cercana a caminatas, montañas, parada de autobús y la zona de esquí.

Nos dieron una habitación muy espaciosa y enorme, tal como esperaba, con una gran vista. El desayuno incluía pasteles deliciosos y una gran vista. Los empleados eran extremadamente amables. La ubicación del hotel es excelente, a pocos pasos de la parada de autobús y de las montañas. está cerca de Picol Bar Vich, donde probé buenos postres.

Hotel bonito y precioso con un personal muy amistoso. Habitaciones amplias y tranquilas, con una gran vista. Desayuno delicioso y abundante. Ubicación excelente cerca de rutas de senderismo, parada de autobús y restaurantes. Servicios agradables. No dudaría en recomendar este hotel, ¡no quería irme!

Ubicado en una zona tranquila, es ideal para los amantes del esquí, a pocos minutos del centro de la ciudad. Las habitaciones son espaciosas y algunos tienen una terraza con vistas maravillosas. El servicio es amable y atento, siempre dispuesto a hacer que tu estancia sea especial. El desayuno es generoso, con pan y pasteles caseros deliciosos.

Sería ideal contar con instalaciones para preparar té o café en la habitación.